Solenodonte de La Española

El Solenodonte de La Española (Solenodon paradoxus), endémico de la isla, es un mamífero placentario de la familia de los solenodóntidos, siendo sus parientes más cercanos los topos y las musarañas.

Tiene antepasados que vivieron junto a los dinosaurios hace 60-70 millones de años.

Su cuerpo posee una longitud de 28 a 32 cm, la cola mide de 17 a 27 cm y puede alcanzar un peso de 800 a 1000 gramos.  Es de color rojizo y su principal característica es un largo hocico, a modo de pequeña trompa.

Son nocturnos. Durante las horas del día, permanecen en sus madrigueras, árboles, troncos ahuecados o cuevas, permaneciendo ocultos a la vista.

Sus madrigueras pueden contener múltiples cámaras y túneles y generalmente están habitadas por una pareja adulta acompañada por hasta seis miembros más jóvenes de la familia. Cuando salen al aire libre corren con las plantas de los pies, siguiendo un rumbo errático y en zigzag.

Se alimentan principalmente de artrópodos, pero también de gusanos, caracoles, ratones y pequeños reptiles; también pueden alimentarse de una pequeña cantidad de frutas, granos y hojarasca. Sondean la tierra con sus hocicos y cavan o rasgan troncos podridos con sus garras.

Su saliva es venenosa y pueden inyectarla a sus presas o a sus congéneres, utilizando ranuras en sus segundos incisivos inferiores, de donde proviene su nombre científico, Solenodon, «diente surcado o acanalado».

El veneno es muy activo y cuando dos de estos animales se pelean ocurre que uno de ellos puede morir. Sin embargo, su mordedura no supone ningún problema para el ser humano, salvo el dolor o una leve infección.

 Se considera que en la actualidad solo habita las áreas protegidas del Parque Nacional Jaragua, la Sierra de Bahoruco y la Reserva de Loma Quita Espuela.

Figura en la categoría de en peligro de extinción en la Lista Roja Nacional publicada en 2011, a causa de la disminución, fragmentación y deterioro de la calidad de su hábitat.

 Una especie está en esa categoría cuando no figura “En Peligro Crítico”, pero enfrenta un riesgo muy alto de extinción en estado silvestre en un futuro cercano.