Santuario de San Dionisio, antiguo Santuario de Nuestra Señora de la Altagracia (Higüey)
El Santuario de San Dionisio, considerado el primer santuario mariano de América, está situado frente al Parque Central de la ciudad de Higüey.
Empezó a construirse entre 1567 y 1569, en el mismo lugar donde estaba la vieja ermita techada de paja donde tuvo su primer asiento el culto a la virgen, concluyéndose en 1572, siendo consagrado ese mismo año por el arzobispo extremeño Fray Andrés de Carvajal (Alcántara, c.1514-Higüey, 1577) para acoger en su retablo el óleo de la Virgen de la Altagracia que llegó de España en el año 1502 o en años posteriores cercanos.
La construcción del templo se debió principalmente al canónigo Alonso de Peña, quien aportó recursos económicos propios y la dirección de los trabajos, y al mayordomo del santuario, Simón de Bolívar, quinto abuelo del líder del movimiento de independencia latinoamericano, quien gestionó la ayuda necesaria para su terminación.
A mediados del siglo XVI, los habitantes de Higüey eran unos trescientos y el santuario era casi el único centro que conseguía agruparlos.
El hoy “Monumento Histórico Iglesia Parroquial San Dionisio” ha sido modificado sucesivamente en el transcurso de los siglos tras sufrir huracanes, terremotos y el paso del tiempo.
La fachada es sobria, así como la torre campanario, de escasa elevación, que guarda campanas donadas por Joaquín Alfáu en el año de 1864, quien también obsequió el pavimento de mármol del templo en el año 1876.
El portal es de ladrillo con un arco de medio punto y encima una ventana vertical sirve para la entrada de luz.
Es de nave única y presenta capillas laterales entre contrafuertes y pilares sobre los que se apoyan arcos ojivales que sostienen una bóveda de cañón.
La cúpula que cubre el presbiterio, elevado sobre el nivel de los fieles, es semiesférica y asemeja una concha marina.
En el retablo principal, barroco, tallado a mano con caoba en el siglo XVI, estuvo la imagen de Nuestra Señora de la Altagracia hasta su traslado en 1971 a la actual Basílica Catedral de Higüey.
La mesa del altar luce un artístico frontal de plata.
En el santuario se custodian valiosos objetos de importancia histórica y religiosa, entre ellos, una corona de oro y piedras preciosas rematada en una cruz de diamantes que sostienen dos ángeles de oro macizo, que fue confeccionada con el oro y alhajas donados por el pueblo dominicano para la canónica y pontificia coronación de la virgen en el Baluarte 27 de Febrero de Santo Domingo el 15 de agosto de 1922.
Descripción y detalles
Las cinco primeras fotos están realizadas despues de terminada la restauración del año 2022.
De las tres últimas fotos, sólo la última tiene fecha aproximada, estimándose que fue hecha alrededor de 1930
Nota: Fotos e ilustraciones obtenidas de Internet.
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